¡Alerta! El Tiempo Cambia: ¿Lluvias, Nieve o Sol? Descubrí Qué Te Espera
Colaboradores
La primera semana de agosto trae consigo un clima variable en Argentina. Mientras que la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense disfrutarán de días soleados y temperaturas agradables, otras regiones del país se preparan para enfrentar condiciones meteorológicas adversas.
Pronóstico para Buenos Aires y alrededores
Después de la tormenta del viernes, el fin de semana en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se presenta seco y con temperaturas frescas. El sábado, la mínima será de 13 grados y la máxima de 17 grados, con cielos algo cubiertos pero sin lluvias. El domingo, la temperatura mínima descenderá a 9 grados, manteniendo la máxima en 17 grados, con un cielo parcialmente nublado y sin precipitaciones.
La semana entrante comenzará con un marcado descenso de temperatura, alcanzando una mínima de 5 grados. La máxima se situará en 14 grados, con un cielo mayormente nublado. A partir del miércoles, las temperaturas oscilarán entre 8 y 15 grados, con días frescos y estables. Sin embargo, existe una pequeña probabilidad de lluvias, entre un 0 y 10%, a partir de la tarde del jueves y hasta la noche del viernes.
Alertas por nevadas y vientos en ocho provincias
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha emitido alertas meteorológicas para ocho provincias debido a nevadas y vientos intensos. La zona cordillerana de Mendoza, el sur de Chubut y algunas áreas de Santa Cruz se encuentran bajo alerta por nieve. En Mendoza, se espera una acumulación de nieve entre 30 y 50 centímetros, acompañada de posibles vientos intensos.
Es fundamental mantenerse informado sobre las actualizaciones del pronóstico del tiempo y tomar las precauciones necesarias para evitar inconvenientes y garantizar la seguridad ante las condiciones climáticas adversas.
Recomendaciones ante el alerta meteorológico:
- Consultar fuentes oficiales de información meteorológica.
- Evitar actividades al aire libre en zonas afectadas por nevadas o vientos fuertes.
- Conducir con precaución en caso de nevadas, utilizando cadenas en los neumáticos si es necesario.
- Asegurar objetos que puedan ser desplazados por el viento.