El Juzgado Tercero Penal de Medellín ha ordenado a la Fiscalía investigar al expresidente Álvaro Uribe Vélez y a su hermano, Santiago Uribe, por su presunta participación en los asesinatos de dos defensores de derechos humanos en la década de los 90. Esta decisión se enmarca dentro de la condena contra José Miguel Narváez, ex subdirector del DAS, por el secuestro de la senadora Piedad Córdoba.
Los Casos de Jesús María Valle y Eduardo Umaña
La investigación se centra en los homicidios de Jesús María Valle Jaramillo, asesinado el 27 de febrero de 1998, y Eduardo Umaña Mendoza, asesinado el 18 de abril del mismo año. Jesús María Valle era el presidente del Comité de Derechos Humanos de Antioquia y había denunciado la presunta colaboración de militares en las masacres de La Granja y San Roque. Su asesinato ocurrió mientras recibía a un campesino que le iba a dar detalles sobre la masacre de El Aro.
El Testimonio Clave
Según informes, la decisión del juzgado se basa en un testimonio del exparamilitar Francisco Villalba, quien involucra al expresidente Uribe y a su hermano Santiago en una reunión donde se habrían planeado los asesinatos. En ese momento, Álvaro Uribe era gobernador de Antioquia.
Ante estas acusaciones, el expresidente Uribe ha calificado la compulsa como “miserable” y ha negado la existencia de la reunión mencionada en el testimonio. La defensa del expresidente argumenta que ya se había investigado esa declaración con anterioridad.
Este caso ha generado gran controversia en el país, reabriendo el debate sobre el papel de diferentes actores en el conflicto armado colombiano y la protección de los defensores de derechos humanos.
La investigación apenas comienza y se espera que la Fiscalía General de la Nación realice las diligencias necesarias para determinar la veracidad de las acusaciones y el grado de responsabilidad de los implicados.