Atentado a Miguel Uribe: Detalles del Plan y Último Parte Médico
La investigación sobre el atentado contra Miguel Uribe Turbay, precandidato presidencial del partido Centro Democrático, avanza con nuevas revelaciones. Carlos Eduardo Mora González, conductor venezolano implicado en el ataque, ha brindado detalles cruciales sobre la planificación y ejecución del mismo.
Declaraciones del Conductor Implicado
Según información obtenida, Mora confesó haber sido contactado por un individuo apodado "el Costeño", quien sería el cerebro detrás del atentado. Mora, quien trabajaba como conductor a través de la aplicación InDrive en Soacha, recibió la oferta de 5 millones de pesos colombianos para participar en la operación criminal. Su rol consistía en transportar a los implicados y facilitar la logística del ataque, que según sus palabras, implicaba "meterle plomo" a la víctima.
Videos de seguridad han sido fundamentales para vincular a Mora con la planeación del atentado, corroborando su testimonio y proporcionando evidencia física de su participación. Las autoridades continúan investigando para determinar la totalidad de los implicados y sus motivaciones.
Estado de Salud de Miguel Uribe Turbay
La Fundación Santa Fe ha emitido un nuevo parte médico sobre la salud de Miguel Uribe Turbay. El comunicado indica que el precandidato permanece en la unidad de cuidados intensivos, bajo manejo multidisciplinario. Se le está realizando un monitoreo hemodinámico y neurológico continuo para evaluar la función de su corazón y cerebro. El pronóstico sigue siendo reservado.
Un "pronóstico reservado" implica que la evolución del paciente no es predecible a corto plazo y que se requiere una observación constante para evaluar la respuesta a los tratamientos. El "manejo multidisciplinario" indica que diversas especialidades médicas están involucradas en el cuidado del paciente, asegurando una atención integral.
Reacciones al Atentado
El atentado contra Miguel Uribe ha generado una ola de reacciones a nivel nacional e internacional. Un editorial del Wall Street Journal advierte sobre el "regreso de Colombia a la violencia", señalando que el ataque no es un hecho aislado, sino un síntoma de la erosión del Estado de derecho y una amenaza a la democracia. El editorial critica el proceso de paz del gobierno anterior, argumentando que ha llevado a un aumento de la inseguridad y al fortalecimiento de grupos criminales.