La activista climática Greta Thunberg ha denunciado haber sufrido un trato severo durante su detención en Israel, tras ser arrestada en una flotilla que transportaba ayuda a Gaza. Según correspondencia a la que tuvo acceso The Guardian, Thunberg informó a funcionarios suecos sobre las duras condiciones de su encarcelamiento, incluyendo la falta de alimentos y agua suficientes.
Denuncia de Condiciones Inhumanas
En un correo electrónico enviado por el Ministerio de Asuntos Exteriores sueco a personas cercanas a Thunberg, un funcionario que visitó a la activista en prisión relató que ella afirmó haber estado detenida en una celda infestada de chinches, con escasa comida y agua. "La embajada ha podido reunirse con Greta", se lee en el correo electrónico. "Informó de deshidratación. Ha recibido cantidades insuficientes de agua y comida. También declaró que había desarrollado erupciones que sospecha fueron causadas por chinches. Habló de un trato duro y dijo que había estado sentada durante largos períodos sobre superficies duras".
¿Obligada a Posar con Banderas?
Otra acusación grave es que las fuerzas israelíes habrían tomado fotografías de Thunberg donde supuestamente fue obligada a sostener banderas. La identidad de las banderas no se ha revelado. "Otro detenido informó a otra embajada que la habían visto [a Thunberg] siendo obligada a sostener banderas mientras se tomaban fotografías. Se preguntó si se habían distribuido imágenes de ella", añadió el funcionario del ministerio sueco.
Corroboración de las Acusaciones
La alegación fue corroborada por al menos otros dos miembros de la flotilla que habían sido detenidos por las fuerzas israelíes y liberados el sábado. Esta situación ha generado preocupación y ha puesto en el punto de mira el trato que reciben los activistas detenidos en la región. La comunidad internacional está atenta al desarrollo de este caso y exige una investigación exhaustiva sobre las denuncias de maltrato.
El gobierno Israelí no ha emitido declaraciones al respecto.