¡Un avance médico revolucionario!
Un diminuto chip implantado en los ojos de personas que sufren pérdida de visión debido a la degeneración macular irreversible relacionada con la edad ha logrado restaurar la visión central en un avance médico sin precedentes. Este desarrollo promete cambiar la vida de miles de peruanos que padecen esta condición.
El sistema, llamado PRIMA, fue probado en 17 hospitales europeos y logró restaurar la visión central en 26 de 32 pacientes que lo utilizaron durante 12 meses. ¡Muchos de ellos incluso pudieron volver a leer! Este resultado, fruto del trabajo de un gran equipo internacional de médicos y científicos durante muchos años, representa un gran avance en los tratamientos para la pérdida de visión.
"Es la primera vez que un intento de restauración de la visión logra tales resultados en un gran número de pacientes", afirma el oftalmólogo José-Alain Sahel de la Facultad de Medicina de la Universidad de Pittsburgh, coautor principal de un artículo que describe los resultados. "Más del 80 por ciento de los pacientes pudieron leer letras y palabras, y algunos de ellos están leyendo páginas de un libro. Esto es realmente algo con lo que no podíamos haber soñado cuando comenzamos este viaje, junto con Daniel Palanker, hace 15 años".
¿Cómo funciona el chip PRIMA?
La pérdida de visión geográfica por degeneración macular relacionada con la edad es una condición progresiva e irreversible que afecta a millones de personas en todo el mundo. La mácula, responsable de la visión central de alta resolución, reside dentro de la retina en la parte posterior del ojo. A medida que esta parte de la retina se atrofia, se desarrollan parches de ceguera en la visión central de una persona.
En una retina sana, las células fotorreceptoras convierten la luz en señales eléctricas que se procesan en la retina interna y se envían al cerebro. Para las personas con atrofia geográfica, estas células fotorreceptoras mueren, lo que significa que parte del ojo no recibe señales de luz, creando un punto ciego en el centro de su visión, mientras que la visión periférica permanece intacta.
El chip PRIMA actúa como un reemplazo de estas células fotorreceptoras dañadas, permitiendo que la retina interna reciba nuevamente señales visuales y las transmita al cerebro. Este innovador sistema ofrece una esperanza real para aquellos que han perdido la vista debido a esta enfermedad debilitante.