Un avión de transporte Lockheed Martin C-130 Hercules de la Fuerza Aérea Turca (TurAF) se estrelló el 11 de noviembre mientras sobrevolaba Georgia, cobrando la vida de las 20 personas a bordo. El Ministerio de Defensa Nacional Turco (MND) confirmó la trágica noticia, informando que el avión se dirigía desde Azerbaiyán hacia Turquía.
"Un avión de carga militar C-130 que despegó de Azerbaiyán hacia [Turquía] se estrelló en la frontera entre Georgia y Azerbaiyán. Se han iniciado los esfuerzos de búsqueda y rescate en coordinación con las autoridades azerbaiyanas y georgianas", declaró el MND en un comunicado. Posteriormente, confirmaron que 20 personas viajaban a bordo de la aeronave.
El anuncio del MND se produjo después de que se publicaran imágenes en línea que mostraban la sección del ala separada del avión cayendo del cielo, junto con fotografías de la sección trasera del fuselaje y la rampa, así como otros restos de la aeronave esparcidos por el suelo.
Los servicios de rastreo de vuelos en línea identificaron la aeronave en particular como un C-130E, con número de serie 68-1609. Según Planespotters.net, este avión fue entregado nuevo a la Real Fuerza Aérea Saudí en diciembre de 1968, antes de ser transferido a la TurAF en noviembre de 2022.
Antes de este trágico accidente, la TurAF operaba 13 C-130E que datan de 1964 y seis C-130B que, si bien fueron recibidos como estructuras de aviones excedentes en 1991, fueron construidos alrededor del mismo período. Se espera que reciba 12 estructuras de aviones C-130J excedentes mucho más nuevos del Reino Unido a principios de 2026.
¿Qué significa este accidente para la Fuerza Aérea Turca?
Este accidente representa una pérdida significativa para la Fuerza Aérea Turca, tanto en vidas humanas como en capacidad operativa. El C-130 Hercules es un avión de transporte vital para la TurAF, utilizado para una variedad de misiones, incluyendo el transporte de tropas, equipos y suministros.
La investigación sobre las causas del accidente está en curso. Las autoridades turcas, azerbaiyanas y georgianas están colaborando para determinar qué causó la caída del avión. Los resultados de la investigación serán cruciales para prevenir futuros accidentes y garantizar la seguridad de las operaciones aéreas en la región.