El juicio oral contra el periodista Carlos Granada, acusado de coacción, coacción sexual y acoso sexual, ha entrado en su etapa final. El tribunal colegiado, presidido por la magistrada Laura Ocampos, se prepara para dictar sentencia tras escuchar los alegatos finales de las partes.
Alegatos Finales y Pedidos de la Fiscalía
Durante la jornada, las fiscalas Claudia Aguilera, Luz Guerrero y Natalia Silva, junto con la querella, presentaron sus réplicas, refutando el pedido de la defensa sobre la prescripción del delito de acoso sexual. La Fiscalía se mantuvo firme en su solicitud de una pena de 10 años de prisión para Granada, argumentando que existen pruebas suficientes para demostrar un patrón de comportamiento reiterado.
Según la Fiscalía, se recolectaron testimonios de más de diez mujeres, cuyos relatos coinciden en conductas que sugieren un acoso serial. Si bien solo seis víctimas formalizaron la querella, la Fiscalía sostiene que las pruebas presentadas son contundentes.
Argumentos de la Defensa
La defensa, encabezada por el abogado Álvaro Arias, argumentó que el delito de acoso sexual ya prescribió, ya que han transcurrido más de dos años desde el auto de apertura a juicio oral. Arias también señaló que no se han probado los delitos de coacción, coacción sexual y violación, basándose únicamente en las declaraciones de las víctimas y un test psicológico.
Expectativa por la Sentencia
La expectativa es alta en torno a la sentencia que emitirá el tribunal. Si no surgen incidentes de último momento, se espera que el fallo se dé a conocer en breve. El caso ha generado un amplio debate público, especialmente por el hecho de que Granada enfrenta el juicio en libertad, a pesar de la gravedad de las acusaciones.
El Ministerio Público ha solicitado una pena de 10 años de cárcel para el ex gerente del Grupo Albavisión, basándose en las acusaciones de coacción sexual, violación, acoso sexual y coacción. Las fiscales sostienen que son diez las mujeres afectadas, aunque solo seis figuran en la acusación. El juicio, ahora en su etapa de alegatos finales, mantiene a la opinión pública a la espera de una resolución.