Giorgian de Arrascaeta, el talentoso mediocampista uruguayo, está viviendo un momento estelar en el Flamengo. Su desempeño ha generado elogios y comparaciones con leyendas del club, consolidándose como una figura clave en el equipo carioca.
Latorre lo proclama: "El mejor de Sudamérica"
El ex futbolista y comentarista de ESPN, Diego Latorre, no escatimó en elogios para Arrascaeta, afirmando que es "el mejor jugador de América del Sur". Esta declaración se produjo en la víspera de la final de la Copa Libertadores, resaltando la importancia del uruguayo en el esquema del Flamengo. Latorre enfatizó que no era solo una impresión personal, sino que su rendimiento en el campo lo demostraba, respaldado por quienes siguen de cerca el fútbol brasileño. "Está teniendo una temporada en la que está beirando a la perfección", añadió.
Año de consagración para Arrascaeta
Más allá de los halagos, los números hablan por sí solos. Arrascaeta fue elegido el mejor jugador de la Libertadores 2025, sumando su tercer título en la competición. En la final, fue el responsable del tiro de esquina que culminó en el gol del campeonato. Además, asumió la emblemática camiseta número 10 del Flamengo, demostrando su liderazgo y jerarquía dentro del plantel.
En lo que va del 2025, Arrascaeta ha disputado 60 partidos, anotando 23 goles y brindando 18 asistencias. Esto significa que participa en goles en aproximadamente siete de cada diez partidos. Su influencia en el juego del Flamengo es innegable.
A un paso de un récord histórico
El legado de Petkovic, ex jugador del Flamengo, siempre ha sido una referencia para quienes visten la camiseta número 10. Arrascaeta está cerca de superar una marca que Petkovic mantiene desde hace 25 años. El uruguayo ha sido fundamental en los partidos recientes y tiene la oportunidad de entrar aún más en la memoria de la afición al igualar o superar ese récord.
Si Arrascaeta logra igualar o superar la marca de Petkovic, tendrá un fuerte significado simbólico, reforzando la continuidad entre generaciones y la tradición de la camiseta número 10 en el club. Para el Flamengo, es una señal de que el modelo de juego mantiene un protagonista creativo y decisivo.