La presencia militar de Estados Unidos en el Caribe ha alcanzado niveles inusuales, generando interrogantes sobre una posible intervención en Venezuela. El despliegue del portaaviones USS Gerald Ford, junto con su grupo de batalla, representa una demostración de fuerza sin precedentes en la región.
Despliegue Militar Estadounidense: Un Martillo en el Caribe
El USS Gerald Ford, un portaaviones nuclear de última generación, ha llegado al área de operaciones del Comando Sur de Estados Unidos. Según Víctor M. Mijares, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Los Andes, este despliegue incluye más de 70 aviones de combate y varios destructores, sumándose a las fuerzas estadounidenses ya presentes en la zona. Esta concentración de poderío aeronaval es considerada inusual en la mayoría de los mares del mundo, y especialmente en el Caribe.
¿Disuasión o Preparación para la Acción?
Si bien la presencia militar estadounidense podría interpretarse como una estrategia de disuasión, las declaraciones del presidente Donald Trump alimentan las especulaciones sobre una posible intervención. Trump afirmó tener una decisión tomada respecto a las acciones militares en Venezuela, aunque evitó revelar detalles. Esta ambigüedad estratégica, según un funcionario anónimo citado por el Washington Post, busca mantener en incertidumbre a los adversarios.
- El Comando Sur de EE.UU. ha intensificado sus operaciones contra el narcotráfico en el Caribe.
- Se han difundido imágenes de la destrucción de embarcaciones con presuntos narcotraficantes.
- Trump mantiene una postura ambigua sobre sus planes en Venezuela.
La situación en el Caribe sigue siendo tensa, y la comunidad internacional observa con atención los movimientos de Estados Unidos. La pregunta clave es si este despliegue militar es una herramienta de presión para forzar un cambio político en Venezuela, o si se trata de la antesala de una intervención militar directa.