Las relaciones entre Venezuela y varios países se tensan en el ámbito aéreo. El gobierno de Nicolás Maduro ha revocado los derechos de tráfico aéreo a Iberia, TAP, Avianca, Latam Colombia, Turkish Airlines y Gol, acusándolas de sumarse a un supuesto “terrorismo de Estado” promovido por Estados Unidos al suspender vuelos hacia y desde Venezuela. Esta drástica medida impide a estas aerolíneas operar nuevamente en el país.
La decisión se basa en la interpretación del gobierno venezolano de que estas aerolíneas siguieron las recomendaciones de la Autoridad Federal de Aviación Civil de EE. UU. (FAA), mientras que Air Europa y Plus Ultra, que también suspendieron vuelos, lo hicieron siguiendo el consejo de la Agencia Española de Seguridad Aérea (Aesa), lo que aparentemente las salvó de la represalia.
El Gobierno de Portugal ya ha expresado su preocupación por la situación.
Vuelos de Repatriación a EE.UU. Suspendidos
Paralelamente, los vuelos de repatriación de migrantes venezolanos desde Estados Unidos han sido suspendidos de manera inmediata. El gobierno de Maduro atribuye esta decisión a declaraciones de Donald Trump, quien afirmó que el espacio aéreo venezolano “permanecerá cerrado en su totalidad”.
Esta suspensión pone fin a un acuerdo bilateral de once meses que permitió el retorno de miles de venezolanos. Según la Cancillería venezolana, la declaración de Trump es una señal de ruptura con los mecanismos que permitían la coordinación logística de estos vuelos.
¿Qué pasará con los venezolanos que esperaban retornar?
Desde enero, se realizaron 75 vuelos de repatriación, permitiendo el retorno de 13.956 venezolanos. La suspensión detiene nuevas rutas programadas y genera incertidumbre sobre la continuidad de este mecanismo, que era la principal vía formal para el retorno de migrantes. El gobierno venezolano insiste en que ninguna autoridad extranjera puede interferir en su espacio aéreo.
Las autoridades venezolanas reiteraron que, a su juicio, el mensaje del presidente estadounidense constituye una acción unilateral, sin especificaciones operativas, que afecta directamente el funcionamiento de los vuelos previstos.