Mundial de Clubes 2025: ¿Es la Copa Konami de la vida real?
La FIFA reinventa el Mundial de Clubes y lo convierte en una experiencia... peculiar. ¿Recuerdas esos campeonatos improvisados en el Pro Evolution Soccer (PES), donde mezclabas equipos al azar y creabas enfrentamientos impensables? Pues bien, la FIFA parece haber tomado inspiración de esa nostalgia, aunque con un toque de jet lag, para el Mundial de Clubes 2025.
Un torneo que huele a Liga Master
Este nuevo formato, con equipos que quizás no reconozcas y partidos que te dejan preguntándote por qué están jugando, se asemeja más a un modo editar con escudos desconocidos que a una verdadera competición de élite. La idea de enfrentar a equipos de diferentes continentes siempre es atractiva, pero la disparidad de niveles, especialmente con los equipos europeos llegando en un estado físico y mental superior, termina diluyendo la emoción.
¿Justicia Deportiva?
Para muchos, este Mundial de Clubes 2025 es un torneo metido con calzador. Si bien la idea podría ser interesante con una mejor planificación, y los beneficios económicos son innegables (1000 millones de dólares a repartir), jugarlo en estas fechas parece un error. El calendario futbolístico ya está saturado, y añadir este torneo solo genera fatiga en jugadores y aficionados.
El ritmo de los partidos, el nivel de juego y la falta de concentración de algunos equipos son evidentes. Incluso algunos entrenadores, como Luis Enrique con el PSG, han optado por permitir a sus jugadores disfrutar de tiempo libre, como ir de compras o visitar a sus familias.
La FIFA lo promociona como el evento definitivo, pero la realidad es que se asemeja más a una Liga Master con fichajes automáticos. ¿Justicia deportiva? Algunos equipos participan gracias a méritos de hace tres temporadas, mientras que otros, con mejor rendimiento actual, se quedan fuera. En definitiva, un torneo con luces y sombras que genera debate entre los amantes del fútbol.