San Lorenzo en terapia intensiva: AFA toma el control
La situación institucional de San Lorenzo ha llegado a un punto crítico. Tras una serie de reuniones fallidas entre la dirigencia del club y Claudio Tapia, presidente de la AFA, la Asociación del Fútbol Argentino ha decidido tomar cartas en el asunto y determinará los próximos pasos a seguir.
La AFA emitió un comunicado contundente donde expresa que, a pesar de los esfuerzos, no se ha logrado un acuerdo para establecer un proyecto político que beneficie a San Lorenzo. Esta falta de consenso, sumada a la negativa del presidente Marcelo Moretti a renunciar, ha llevado a la AFA a asumir la responsabilidad de encontrar una solución a la profunda crisis que atraviesa el club de Boedo.
¿Qué opciones maneja la AFA?
Ante este panorama, la AFA baraja varias opciones para encauzar la situación institucional de San Lorenzo. Entre ellas, se maneja la posibilidad de designar una comisión normalizadora que gestione el club de manera transitoria hasta la celebración de nuevas elecciones. Otra alternativa sería la designación de un veedor que supervise el funcionamiento institucional del club.
La postura de la AFA es clara: evitar a toda costa la acefalía y garantizar una transición ordenada hacia una nueva conducción democrática. Sin embargo, la falta de acuerdo entre las diferentes facciones de la dirigencia de San Lorenzo complica aún más la situación.
El fantasma de la desafiliación
En medio de la crisis, sobrevuela el fantasma de la desafiliación. Claudio Tapia habría advertido a los dirigentes de San Lorenzo sobre las consecuencias de una posible intervención de la Inspección General de Justicia (IGJ), llegando a mencionar la posibilidad de la desafiliación del club.
La AFA exige garantías económicas para avalar cualquier proyecto transitorio. Sergio Costantino, quien ya se había presentado como candidato en las últimas elecciones, propuso un plan de gobierno transitorio, pero la AFA exige que presente los avales económicos correspondientes para respaldar su iniciativa. La validación de estos fondos es una condición indispensable para que la AFA y el juez interviniente den el visto bueno a la conducción transitoria.
El futuro de San Lorenzo es incierto. La intervención de la AFA marca un punto de inflexión en la historia del club y plantea interrogantes sobre su futuro institucional y deportivo. Los próximos días serán cruciales para definir el rumbo que tomará el club de Boedo.