La leyenda surcoreana de los esports, Lee Sang-hyeok, conocido mundialmente como Faker, se prepara para un hito sin precedentes en su carrera: buscar su sexto campeonato mundial de League of Legends. A sus 29 años, Faker lidera a su equipo, T1, en la final del Worlds 2025 contra KT Rolster, en un enfrentamiento coreano que promete ser épico en Chengdu, China.
15 años de historia y un posible récord
Este año, la final del Campeonato Mundial de League of Legends (LoL Worlds) coincide con el 15º aniversario del torneo, un evento que ha crecido exponencialmente desde sus humildes comienzos. Para Faker, esta final representa la oportunidad de consolidar aún más su legado como el mejor jugador de todos los tiempos (GOAT) en League of Legends, comparable a figuras como Michael Jordan, LeBron James, Lionel Messi o Tiger Woods en sus respectivos deportes.
El equipo ganador se llevará a casa un premio de $5 millones de dólares, además de una parte de las ventas de cosméticos especiales dentro del juego, conocidos como 'skins', diseñados en honor a los campeones.
Un camino lleno de rivalidades
La final entre T1 y KT Rolster no es solo una batalla por el título, sino también un choque de titanes en la midlane. Faker se enfrentará a Gwak "Bdd" Bo-seong, un rival con quien ha compartido más de diez años de competencia y 135 enfrentamientos directos. Bdd, después de una década de carrera, busca consagrarse con su primer título mundial, mientras que Faker intentará demostrar, una vez más, su dominio en el juego.
Las apuestas están abiertas
T1 es el favorito en las casas de apuestas, pero KT Rolster ha demostrado su capacidad de superar obstáculos y llegar a la final con un rendimiento sorprendente. La predicción del primer asesinato (first blood) es un tema candente entre los apostadores, con cuotas muy parejas que reflejan la incertidumbre y la emoción que rodean este enfrentamiento.
- T1 para obtener el primer asesinato: cuota de 1.90
- KT Rolster para obtener el primer asesinato: cuota de 1.80
La final del LoL Worlds 2025 promete ser un evento histórico, lleno de emoción, rivalidad y la búsqueda de la gloria por parte de dos equipos coreanos que han dejado su huella en el mundo de los esports.