Antioquia Impulsa la Conectividad: Avances y Retos de la Ruta al Mar
La infraestructura vial en Colombia enfrenta desafíos constantes, pero proyectos como la Ruta al Mar, que conecta Antioquia con Bolívar, representan un avance significativo. Valora Analitik entrevistó a Manuel Raigozo, gerente de la concesión Ruta al Mar, para conocer el estado actual y los retos de este importante corredor vial de 495 kilómetros.
Avances y Operación Actual
Según Raigozo, el proyecto Ruta al Mar presenta un avance cercano al 95% en la ejecución de las obras previstas. Actualmente, todo el corredor concesionado está en operación, permitiendo a los usuarios recorrer la ruta completa sin mayores inconvenientes. Se espera que a finales de este año, la operación sea completamente normal en los 495 kilómetros.
Retos Sociales y Financieros
La operación de la Ruta al Mar enfrenta diversos retos, especialmente en el ámbito social. Bloqueos y manifestaciones son parte del día a día, afectando a los usuarios, generando pérdidas a los transportadores e impactando el recaudo de la concesión. A pesar de estas dificultades, la operación del corredor continúa con normalidad.
El Caso del Peaje de La Caimanera
Uno de los puntos más polémicos ha sido el retiro del peaje de La Caimanera por el gobierno en enero de 2023. La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) ha intentado reubicar el peaje, pero la comunidad de Tolú, organizada en el Comité No al Peaje, se ha opuesto rotundamente. La última propuesta de ubicarlo en la variante de Coveñas también ha sido rechazada.
Solidaridad Antioqueña: Apoyo al 'Pipa' de Ávila
Más allá de la infraestructura, Antioquia también destaca por la solidaridad de su gente. Un ejemplo reciente es la cadena de favores que se está gestando en Carmen de Viboral para apoyar a Anthony 'el Pipa' de Ávila. Un encuentro benéfico se realizará el 16 de noviembre en las canchas élite de Carmen de Viboral, demostrando la unión y el apoyo característico de la región.
Una panadería en Carmen de Viboral, llamada Los Manjares, se ha convertido en un templo para los seguidores del América de Cali, demostrando la pasión y el arraigo cultural en la región. El dueño, un paisa hincha del América, organiza eventos y muestra su colección de camisetas y recuerdos del equipo, uniendo a la comunidad en torno al fútbol y la solidaridad.