Alejandro Fernández, 'El Potrillo', conquistó Bogotá con su gira 'De Rey a Rey', un emotivo homenaje a su padre, Vicente Fernández, y a la música mexicana. El Movistar Arena vibró al son de clásicos rancheros y éxitos pop, creando una atmósfera de nostalgia y celebración.
Un Reencuentro Generacional
El concierto inició con la voz grabada de Vicente Fernández, generando una gran emoción en el público. Alejandro apareció vestido de charro, interpretando 'No me sé rajar', un inicio simbólico de un espectáculo que trascendió lo musical, convirtiéndose en un reencuentro entre generaciones.
Antes de Alejandro, su hija Camila Fernández cautivó al público con su talento y homenajes a figuras como Jenny Rivera y Selena Quintanilla. La joven artista expresó su gratitud por la calidez del público bogotano antes de dar paso a su padre.
Un Viaje Musical Inolvidable
El repertorio incluyó canciones emblemáticas de Vicente Fernández como 'Hermoso cariño', 'Lástima que seas ajena', 'Estos celos' y 'Un millón de primaveras', coreadas con fervor por el público. Alejandro también interpretó sus propios éxitos, como 'De qué manera te olvido' y 'Decepciones', demostrando su versatilidad y carisma.
La gira 'De Rey a Rey' es más que un concierto; es un tributo personal y un legado familiar que celebra la música mexicana y la tradición del mariachi. La presentación en Bogotá reafirmó el lugar de Alejandro Fernández como uno de los artistas más importantes de Latinoamérica.
El concierto en Bogotá, programado para el 1 de noviembre de 2025 en el Movistar Arena, promete ser una experiencia inolvidable. Los asistentes podrán disfrutar de una puesta en escena majestuosa, con mariachi en vivo, pantallas de gran formato y una atmósfera que transportará al público al corazón de Jalisco.
Heredando el Trono de la Música Ranchera
A sus 54 años, Alejandro Fernández ha demostrado ser el heredero natural del legado de su padre, consolidándose como una figura clave en la música ranchera. Su gira 'De Rey a Rey' continúa uniendo generaciones y manteniendo viva la tradición musical mexicana.