Las protestas convocadas por la Generación Z en Ciudad de México contra la inseguridad y el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum culminaron en enfrentamientos frente al Palacio Nacional, dejando un saldo de al menos 120 heridos, la mayoría agentes de policía, y 20 detenidos. Las manifestaciones, que también se extendieron a otras ciudades como Guadalajara, fueron impulsadas por el descontento ante asesinatos de alto perfil, incluyendo el del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo.
¿Qué detonó la violencia en las protestas?
La tensión escaló cuando los manifestantes intentaron derribar las vallas de protección del Palacio Nacional. La policía respondió con gases lacrimógenos, lo que provocó enfrentamientos directos. Algunos manifestantes portaban pancartas en homenaje al alcalde Manzo, mientras que otros coreaban consignas contra el gobierno y exigían el fin de la violencia.
Acusaciones y respuestas del gobierno
La presidenta Sheinbaum acusó a políticos de derecha de financiar las protestas y de instrumentalizar a la juventud. Afirmó que la participación de jóvenes fue menor a la esperada y condenó los actos de violencia. Sin embargo, los manifestantes niegan cualquier influencia política y aseguran que su motivación es la creciente inseguridad y la falta de respuestas por parte del gobierno.
- Contexto: Las protestas se producen en un momento de creciente preocupación por la inseguridad en México.
- Participación: Si bien la convocatoria inicial fue de la Generación Z, la mayoría de los asistentes eran personas mayores de 30 años.
- Reacciones: El gobierno minimiza la participación juvenil y denuncia una manipulación por parte de la oposición.
La situación en México sigue siendo tensa, con acusaciones cruzadas y un profundo malestar social que se manifiesta en las calles. Las próximas semanas serán cruciales para observar la evolución de este conflicto y las posibles respuestas del gobierno.