Bruce Willis, un nombre sinónimo de acción y rudeza en Hollywood, ha demostrado ser mucho más que un simple héroe de acción. Su versatilidad se extiende desde películas neo-western hasta una sorprendente incursión en la música, revelando facetas ocultas de su talento y personalidad.
El Neo-Western Olvidado: 'Last Man Standing'
En 1996, Willis protagonizó 'Last Man Standing', un neo-western que, aunque no fue un éxito en taquilla en su momento, ha ganado un estatus de culto. Dirigida por Walter Hill, la película reimagina 'Yojimbo' de Akira Kurosawa en el contexto de la Ley Seca en Texas. Willis interpreta a John Smith, un forastero que se ve envuelto en una guerra entre bandas irlandesas e italianas por el control del contrabando de licor. Su personaje, manipulador y astuto, juega a ambos lados para sobrevivir en un ambiente implacable.
Tras Bambalinas: Una Relación Profesional Distante
La relación entre Hill y Willis durante el rodaje fue descrita como profesional pero distante. Hill comentó que, aunque le gustó trabajar con Willis, percibió un resentimiento por parte del actor, quien sentía que no se apreciaba lo suficiente su talento. A pesar de esto, 'Last Man Standing' ofrece una visión única del género western, combinando elementos del cine de gángsters con los clásicos duelos del Viejo Oeste.
El Crooner Secreto: La Carrera Musical de Bruce Willis
Paralelamente a su éxito en películas de acción como 'Die Hard', Willis sorprendió al mundo con su carrera musical. Lanzó dos álbumes, 'The Return of Bruno' (1987) e 'If It Don’t Kill You, It Just Makes You Stronger' (1989), mostrando un sonido R&B ochentero sorprendentemente romántico. Sus canciones, llenas de ternura, contrastaban con su imagen de tipo duro, revelando una faceta más profunda y sincera de su personalidad. Willis no temió explorar su lado musical, demostrando que su talento iba más allá de la actuación.
'Air Strike': Una Producción Marcada por la Adversidad
La película china 'Air Strike' (2018), en la que Willis tuvo un papel secundario, estuvo plagada de problemas. Desde un diagnóstico erróneo de cáncer para el director Xiao Feng hasta acusaciones de evasión fiscal y fraude, la producción enfrentó numerosos obstáculos. Incluso la participación de Mel Gibson como director de arte fue uno de los aspectos menos extraños de esta accidentada producción. A pesar de contar con estrellas de Hollywood, la película se vio envuelta en controversias y dificultades que marcaron su destino.